Que todos los seres de todos los mundos sean eternamente felices.


sábado, 25 de agosto de 2012


Disparo contra el solcon la fuerza del ocasoMi ametralladoraestá llena de magia. Pero soy solo un hombre más. Cansado de correren la dirección contraria, sin podio de llegaday mi amor me corta la cara, porque soy sólo un hombre más. Pero si pensás que estoy derrotado, quiero que sepas que me la sigo jugandoporque el tiempo, el tiempo no para. 
Unos días sí, otros no, estoy sobreviviendo sin un rasguñón, por la caridad de quien me detesta. 
Y tu cabeza está llena de ratas. Te compraste las acciones de esta farsay el tiempo no para. Yo veo el futuro repetir el pasado, veo un museo de grandes novedades 

domingo, 12 de agosto de 2012

"En la prisión vos eras la única libertad que no podían arrancarme..."
"En la prisión vos eras la única libertad que no podían arrancarme..."
"En la prisión vos eras la única libertad que no podían arrancarme..."
"En la prisión vos eras la única libertad que no podían arrancarme..."
"En la prisión vos eras la única libertad que no podían arrancarme..."
"En la prisión vos eras la única libertad que no podían arrancarme..."
"En la prisión vos eras la única libertad que no podían arrancarme..."
"En la prisión vos eras la única libertad que no podían arrancarme..."
"En la prisión vos eras la única libertad que no podían arrancarme..."
"En la prisión vos eras la única libertad que no podían arrancarme..."

martes, 7 de agosto de 2012


Adoro la teletransportación
Adoro la teletransportación
Adoro la teletransportación
Adoro la teletransportación
Adoro la teletransportación
Adoro la teletransportación
Adoro la teletransportación


Cuando empiezas poco a poco a desprenderte de tu identidad, a ser un humano genérico, dejas de verte en una edad determinada. Luego dejas de identificarte con el tiempo en general. Después ya no te reconoces originario de una patria o hablante de una lengua determinada. No te ves en tu nombre, no te confundes con las cosas que posees, vas cesando en la identificación. Te agarras a lo que eres. A la alegría de la vida. Eres cada vez más feliz y no necesitas el traje rígido del carácter o de la personalidad.



domingo, 5 de agosto de 2012




  1. "No dejamos de jugar por volvernos viejos;

  2. Nos envejecemos porque dejamos de jugar."